«En verano, el hipertenso se expone a cuadros de deshidratación. El calor incide tanto en la dilatación de las arterias, como en la deshidratación, por lo que las personas transpiran mucho y si no toman el suficiente líquido, pueden tener problemas. Tanto la dilatación como la deshidratación son factores importantes para controlar en personas hipertensas», alertó el médico cardiólogo y nefrólogo Gabriel Lapman. El calor incide tanto en la dilatación de las arterias, como en la deshidratación
Según el jefe de consultorios externos del Sanatorio Modelo de Caseros, «los afectados por los cambios de temperatura deben consultar al médico, que puede modificar temporalmente los medicamentos recetados para ajustarse a la época de calor y reducir las molestias de los pacientes». Asimismo, la medicación debe estar indicada y controlada por el profesional médico.
Hipertensión y verano: situaciones especiales
Durante las vacaciones vivimos situaciones distintas y otros factores que, en conjunto, «provocan un descontrol de la tensión arterial», nos indica nuestro doctor, quien señala algunos de estos factores:
- Alimentación inadecuada con mucha sal y grasas
- Fumar excesivamente
- Bebidas alcohólicas
- Practicar menos ejercicio físico y con menor regularidad
En contrapartida, un día de calor puede facilitar el descenso brusco de la tensión arterial, cuadro conocido como hipotensión. «Esto genera algunos síntomas muy específicos y fáciles de identificar», destacó Lapman, quien enumeró entre los más comunes:
– Decaimiento
– Pesadez
– Vértigo, mareos y náuseas
– Sensación de agotamiento y atontamiento
– Dificultad para respirar
– Palpitaciones
– Rigidez en la zona de la nuca
Es probable que durante los meses de calor, las personas con hipertensión deban hacer ajustes temporarios en su medicación para evitar malestares
«Si se presentan todos o algunos de estos signos y la situación se prolonga durante algunas horas, es posible que la persona llegue al desmayo», explicó el especialista, quien resaltó que «es posible mantener la hipertensión controlada con el debido tratamiento y algunas recomendaciones básicas».
Consejos para un verano tranquilo y saludable
Tanto los individuos que experimentan una reducción de su tensión durante el verano como el 60 por ciento restante pueden beneficiarse de estas recomendaciones:
- Una buena hidratación es siempre el mejor aliado y beber agua es la opción óptima para conseguirla.
- Los cambios de horarios en verano favorecen los olvidos de dosis de medicación. Ponerse alarmas en el móvil ayuda a recordar las tomas.
- En vacaciones se tiende a comer más y a beber más alcohol. “Yo recomiendo a las personas con hipertensión que sean prudentes y, sobre todo, que aumenten el ejercicio físico”, recomienda Martell.
- Los mejores momentos para practicar deporte o, simplemente, hacer una buena caminata son las primeras horas de la mañana o el final de la tarde.
- El tabaco y la sal, dos de los grandes enemigos de los hipertensos, están muy presentes en verano. Además de no fumar, se recomienda evitar los alimentos ricos en sal, como las aceitunas, las anchoas y otros aperitivos frecuentes en las terrazas de verano.